Cuando me dicen que yo soy una luchadora, que me admiran por el tiempo que llevo plantándole cara al párkinson, no me parece justo, todas las que padecemos esta enfermedad somos unas luchadoras incansables, somos dignas de admirar pues a pesar de saber que cada día estaremos peor, que nuestra vida está llena de baches y tropiezos, a pesar de estar cansadas de caer, siempre nos volvemos a levantar, muchas veces sin ayuda.
Ser luchadora
